Salmos 133

Cántico para los peregrinos que suben a Jerusalén. Salmo de David.

1 ¡Qué maravilloso y agradable es

cuando los hermanos conviven en armonía!

2 Pues la armonía es tan preciosa como el aceite de la unción

que se derramó sobre la cabeza de Aarón,

que corrió por su barba

hasta llegar al borde de su túnica.

3 La armonía es tan refrescante como el rocío del monte Hermón

que cae sobre las montañas de Sión.

Y allí elSeñorha pronunciado su bendición,

incluso la vida eterna.

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