Isaías 7

Mensaje para Acaz

1 Cuando Acaz, hijo de Jotam y nieto de Uzías, era rey de Judá, Rezín, rey de Aram, y Peka, hijo de Remalías, rey de Israel, salieron para atacar a Jerusalén. Sin embargo, no pudieron llevar a cabo su plan.

2 A la corte real de Judá había llegado la siguiente noticia: «¡Aram se ha aliado con Israelen contra de nosotros!». Por eso, el corazón del rey y el de su pueblo temblaron de miedo, como tiemblan los árboles en medio de una tormenta.

3 Entonces elSeñordijo a Isaías: «Toma a tu hijo Sear-jasuby ve al encuentro del rey Acaz. Lo encontrarás al final del acueducto que conduce el agua al estanque superior, cerca del camino que lleva al campo donde se lavanlas telas.

4 Dile que deje de preocuparse; que no hay por qué temer a la ira feroz de esos dos tizones apagados que son Rezín, rey de Aram y Peka, hijo de Remalías.

5 Es verdad que los reyes de Aram y de Israel han conspirado contra él diciendo:

6 “Atacaremos a Judá y lo conquistaremos y pertenecerá a nosotros. Después pondremos en el trono de Judá al hijo de Tabeel”.

7 Pero esto dice elSeñorSoberano:

»“Esta invasión nunca sucederá,

nunca se llevará a cabo;

8 pues Aram no es más fuerte que Damasco, su capital,

y Damasco no es más fuerte que Rezín, su rey.

En cuanto a Israel, dentro de sesenta y cinco años

será aplastado y destruido por completo.

9 Israel no es más fuerte que Samaria, su capital,

y Samaria no es más fuerte que Peka, hijo de Remalías, su rey.

A menos que ustedes tengan una fe firme,

no puedo hacer que permanezcan firmes”».

Señal de Emanuel

10 Más tarde, elSeñorle envió al rey Acaz el siguiente mensaje:

11 «Acaz, pídele alSeñortu Dios una señal de confirmación. Hazla tan difícil como quieras: tan alta como los cielos o tan profunda como el lugar de los muertos».

12 Pero el rey se negó.

—No —dijo el rey—. No pondré a prueba alSeñorasí.

13 Entonces Isaías le dijo:

—¡Escuchen bien, ustedes de la familia real de David! ¿Acaso no les basta con agotar la paciencia humana? ¿También tienen que agotar la paciencia de mi Dios?

14 Muy bien, el Señor mismo les dará la señal. ¡Miren! ¡La virgenconcebirá un niño! Dará a luz un hijo y lo llamarán Emanuel (que significa “Dios está con nosotros”).

15 Cuando ese hijo tenga edad suficiente para escoger lo correcto y rechazar lo malo, estará comiendo yogury miel.

16 Pues antes de que el niño tenga esa edad, las tierras de los dos reyes que tanto temes quedarán desiertas.

17 »Luego elSeñorhará venir sobre ti, sobre tu nación y sobre tu familia, hechos como nunca hubo desde que Israel se separó de Judá. ¡Pondrá al rey de Asiria en tu contra!

18 En ese día, elSeñorllamará con un silbido al ejército del sur de Egipto y al ejército de Asiria. Ellos te rodearán como un enjambre de moscas o abejas.

19 Vendrán en inmensas multitudes y se establecerán en las regiones fértiles y también en los valles desolados, en las cuevas y en los lugares llenos de espinos.

20 En ese día, el Señor contratará a una «navaja» procedente del otro lado del río Éufrates—el rey de Asiria— y la usará para afeitarte por completo: tu tierra, tus cosechas y tu pueblo.

21 En ese día, un campesino se considerará afortunado si le quedan una vaca y dos ovejas o cabras.

22 Sin embargo, habrá suficiente leche para todos, porque quedarán muy pocos habitantes en la tierra. Comerán yogur y miel hasta saciarse.

23 En aquel día, los viñedos lozanos que hoy valen mil piezas de platase convertirán en parcelas llenas de zarzas y espinos.

24 Toda la tierra se convertirá en una gran extensión repleta de zarzas y espinos, en un territorio de cacería lleno de animales salvajes.

25 Nadie irá a las laderas fértiles donde antes crecían los huertos, porque estarán cubiertas de zarzas y de espinos; allí apacentarán el ganado, las ovejas y las cabras.

Isaías 8

Futura invasión de los asirios

1 Luego elSeñorme dijo: «Haz un letrero grande y escribe con claridad el siguiente nombre: Maher-salal-has-baz».

2 Les pedí al sacerdote Urías y a Zacarías, hijo de Jeberequías, ambos conocidos como hombres honrados, que fueran testigos de lo que yo hacía.

3 Después me acosté con mi esposa y ella quedó embarazada, y dio a luz un hijo. Y elSeñorme dijo: «Ponle por nombre Maher-salal-has-baz.

4 Pues antes de que este hijo tenga edad suficiente para decir “papá” o “mamá”, el rey de Asiria se llevará la abundancia de Damasco y las riquezas de Samaria».

5 Entonces elSeñorvolvió a hablar conmigo y me dijo:

6 «Mi cuidado del pueblo de Judá es como el delicado fluir de las aguas de Siloé, pero ellos lo han rechazado. Se alegran por lo que les sucederá alrey Rezín y al rey Peka.

7 Por lo tanto, el Señor los arrollará con una poderosa inundación del río Éufrates,el rey de Asiria con toda su gloria. La inundación desbordará todos los canales

8 y cubrirá a Judá hasta la barbilla. Extenderá sus alas y sumergirá a tu tierra de un extremo al otro, oh Emanuel.

9 »Reúnanse, naciones, y llénense de terror.

Escuchen, todas ustedes, tierras lejanas:

prepárense para la batalla, ¡pero serán aplastadas!

Sí, prepárense para la batalla, ¡pero serán aplastadas!

10 Convoquen a sus asambleas de guerra, pero no les servirán de nada;

desarrollen sus estrategias, pero no tendrán éxito,

¡porque Dios está con nosotros!».

Un llamado a confiar en el Señor

11 ElSeñorme dio una firme advertencia de no pensar como todos los demás. Me dijo:

12 «No llames conspiración a todo, como hacen ellos,

ni vivas aterrorizado de lo que a ellos les da miedo.

13 Ten por santo en tu vida alSeñorde los Ejércitos Celestiales;

él es a quien debes temer.

Él es quien te debería hacer temblar.

14 Él te mantendrá seguro.

En cambio, para Israel y Judá

será una piedra que hace tropezar a muchos,

una roca que los hace caer.

Y para el pueblo de Jerusalén

será una red y una trampa.

15 Muchos tropezarán y caerán

y no volverán a levantarse;

caerán en la trampa y serán capturados».

16 Preserva las enseñanzas de Dios;

confía sus instrucciones a quienes me siguen.

17 Yo esperaré alSeñor,

que se ha apartado de los descendientes de Jacob;

pondré mi esperanza en él.

18 Yo y los hijos que elSeñorme ha dado servimos como señales y advertencias a Israel de parte delSeñorde los Ejércitos Celestiales, quien habita en su templo en el monte Sión.

19 Tal vez alguien les diga: «Preguntemos a los médiums y a los que consultan los espíritus de los muertos; con sus susurros y balbuceos nos dirán qué debemos hacer». Pero ¿acaso no deberá el pueblo pedirle a Dios que lo guíe? ¿Deberían los vivos buscar orientación de los muertos?

20 ¡Busquen las instrucciones y las enseñanzas de Dios! Quienes contradicen su palabra están en completa oscuridad.

21 Irán de un lugar a otro, fatigados y hambrientos. Y porque tienen hambre, se pondrán furiosos y maldecirán a su rey y a su Dios. Levantarán la mirada al cielo

22 y luego la bajarán a la tierra, pero dondequiera que miren habrá problemas, angustia y una oscura desesperación. Serán lanzados a las tinieblas de afuera.

Isaías 9

Esperanza en el Mesías

1 Sin embargo, ese tiempo de oscuridad y de desesperación no durará para siempre. La tierra de Zabulón y de Neftalí será humillada, pero habrá un tiempo en el futuro cuando Galilea de los gentiles,que se encuentra junto al camino que va del Jordán al mar, será llena de gloria.

2 El pueblo que camina en oscuridad

verá una gran luz.

Para aquellos que viven en una tierra de densa oscuridad,

brillará una luz.

3 Harás que crezca la nación de Israel,

y sus habitantes se alegrarán.

Se alegrarán ante ti

como la gente se goza en la cosecha,

y como los guerreros cuando se dividen el botín.

4 Pues tú quebrantarás el yugo de su esclavitud

y levantarás la pesada carga de sus hombros.

Romperás la vara del opresor,

tal como lo hiciste cuando destruiste al ejército de Madián.

5 Las botas de los guerreros

y los uniformes manchados de sangre por la guerra

serán quemados;

serán combustible para el fuego.

6 Pues nos ha nacido un niño,

un hijo se nos ha dado;

el gobierno descansará sobre sus hombros,

y será llamado:

Consejero Maravilloso,Dios Poderoso,

Padre Eterno, Príncipe de Paz.

7 Su gobierno y la paz

nunca tendrán fin.

Reinará con imparcialidad y justicia desde el trono de su antepasado David

por toda la eternidad.

¡El ferviente compromiso delSeñorde los Ejércitos Celestiales

hará que esto suceda!

Enojo del Señor contra Israel

8 El Señor se ha pronunciado contra Jacob;

su juicio ha caído sobre Israel.

9 Y los habitantes de Israely de Samaria,

quienes hablaron con tanta soberbia y arrogancia,

pronto se enterarán.

10 Decían: «Reemplazaremos los ladrillos rotos de nuestras ruinas con piedra labrada

y volveremos a plantar cedros donde cayeron las higueras sicómoros».

11 Pero elSeñortraerá a los enemigos de Rezín contra Israel

e incitará a todos sus adversarios.

12 Los arameos desde el oriente y los filisteos desde el occidente

sacarán sus colmillos y devorarán a Israel.

Pero aun así no quedará satisfecho el enojo delSeñor;

su puño sigue preparado para dar el golpe.

13 Pues después de tanto castigo, el pueblo seguirá sin arrepentirse;

no buscará alSeñorde los Ejércitos Celestiales.

14 Por lo tanto, en un solo día elSeñordestruirá tanto la cabeza como la cola,

la noble rama de palma y el humilde junco.

15 Los líderes de Israel son la cabeza,

y los profetas mentirosos son la cola.

16 Pues los líderes del pueblo lo han engañado;

lo han llevado por la senda de la destrucción.

17 Por eso el Señor no se complace en los jóvenes,

ni tiene misericordia siquiera de las viudas y los huérfanos.

Pues todos son unos hipócritas perversos,

y todos ellos hablan necedades.

Pero aun así no quedará satisfecho el enojo delSeñor.

Su puño sigue preparado para dar el golpe.

18 Esa perversidad es como un incendio de maleza

que no solo quema las zarzas y los espinos

sino que también hace arder los bosques.

Su fuego hace subir nubes de humo.

19 La tierra quedará ennegrecida

por la furia delSeñorde los Ejércitos Celestiales.

El pueblo será combustible para el fuego,

y nadie perdonará la vida ni siquiera de su propio hermano.

20 Atacarán a su vecino de la derecha

pero seguirán con hambre.

Devorarán a su vecino de la izquierda,

pero no quedarán satisfechos.

Al final, se comerán hasta a sus propios hijos.

21 Manasés se alimentará de Efraín,

Efraín se alimentará de Manasés,

y los dos devorarán a Judá.

Pero aun así no quedará satisfecho el enojo delSeñor;

su puño sigue preparado para dar el golpe.

Isaías 10

1 ¡Qué aflicción les espera a los jueces injustos

y a los que emiten leyes injustas!

2 Privan a los pobres de la justicia

y les niegan sus derechos a los necesitados de mi pueblo.

Explotan a las viudas

y se aprovechan de los huérfanos.

3 ¿Qué harán cuando yo los castigue,

cuando envíe el desastre sobre ustedes desde una tierra lejana?

¿A quién acudirán en busca de ayuda?

¿Dónde estarán seguros sus tesoros?

4 Irán tropezando como prisioneros

o quedarán tendidos entre los muertos.

Pero aun así no quedará satisfecho el enojo delSeñor;

su puño sigue preparado para dar el golpe.

Juicio contra Asiria

5 «Qué aflicción le espera a Asiria, la vara de mi ira.

Yo la empleo como garrote para expresar mi enojo.

6 Envío a Asiria contra una nación pagana;

contra un pueblo con el cual estoy enojado.

Asiria los saqueará,

y los pisoteará como a polvo debajo de sus pies.

7 Pero el rey de Asiria no comprenderá que es mi instrumento;

su mente no funciona de esa forma.

Su plan solo consiste en destruir;

en aplastar a las naciones, una tras otra.

8 Dirá:

“Pronto cada uno de mis príncipes será un rey.

9 Hemos destruido a Calno como hicimos antes con Carquemis.

Hamat cayó ante nosotros como antes había caído Arfad,

y destruimos a Samaria como lo hicimos con Damasco.

10 Sí, hemos acabado con muchos reinos

cuyos dioses eran más grandes que los de Jerusalén y de Samaria.

11 Por eso derrotaremos a Jerusalén y a sus dioses,

tal como destruimos a Samaria con sus dioses”».

12 Después de que el Señor haya utilizado al rey de Asiria para llevar a cabo sus propósitos en el monte Sión y en Jerusalén, se volverá contra el rey de Asiria y lo castigará, porque es soberbio y arrogante.

13 Se jacta diciendo:

«Esto lo hice con el poder de mi brazo;

lo planifiqué con mi astuta sabiduría.

Derribé las defensas de las naciones

y me llevé sus tesoros.

Como un toro, he derribado a sus reyes.

14 Les robé las riquezas a sus nidos

y me he adueñado de reinos como un campesino recoge huevos.

Nadie puede siquiera batir un ala en mi contra.

Nadie puede decir ni pío en protesta».

15 Ahora bien, ¿puede jactarse el hacha de tener un poder mayor que la persona que la usa?

¿Es la sierra mayor que la persona que corta?

¿Puede golpear una vara a menos que la mueva una mano?

¿Puede caminar solo un bastón de madera?

16 Por lo tanto, el Señor, elSeñorde los Ejércitos Celestiales,

enviará una plaga entre las orgullosas tropas de Asiria,

y un fuego ardiente consumirá su gloria.

17 ElSeñor, la Luz de Israel, será un fuego;

el Santo será una llama.

Devorará con fuego los espinos y las zarzas,

y en una sola noche quemará al enemigo por completo.

18 ElSeñorconsumirá la gloria de Asiria

igual que un incendio consume un bosque en tierra fértil,

o una plaga a los enfermos.

19 De ese glorioso bosque, solo sobrevivirán unos cuantos árboles;

tan pocos, que un niño podrá contarlos.

Esperanza para el pueblo del Señor

20 En ese día, el remanente que quedará en Israel,

los sobrevivientes de la casa de Jacob,

ya no seguirán confiando en aliados

que buscan destruirlos.

En cambio, confiarán fielmente en elSeñor,

el Santo de Israel.

21 Un remanente regresará;

sí, el remanente de Jacob regresará al Dios Poderoso.

22 Pero aunque los hijos de Israel son tan numerosos

como la arena a la orilla del mar,

solo un remanente regresará.

ElSeñor, con razón, ha decidido destruir a su pueblo.

23 Sí, el Señor, elSeñorde los Ejércitos Celestiales,

ya ha decidido destruir toda la tierra.

24 Así que esto dice el Señor, elSeñorde los Ejércitos Celestiales: «Oh, mi pueblo de Sión, no temas a los asirios cuando te opriman con vara y con garrote como lo hicieron los egipcios hace mucho tiempo.

25 Dentro de poco se acabará mi enojo contra ustedes, y después mi ira se levantará para destruirlos a ellos».

26 ElSeñorde los Ejércitos Celestiales los azotará con su látigo, como hizo cuando Gedeón venció a los madianitas en la roca de Oreb, o cuando se levantó la vara delSeñorpara ahogar al ejército egipcio en el mar.

27 En ese día, elSeñoracabará con la servidumbre de su pueblo.

Romperá el yugo de la esclavitud

y se lo quitará de los hombros.

28 Miren, los asirios están ahora en Ajat.

Están atravesando Migrón

y almacenando su equipo en Micmas.

29 Están cruzando el paso de montaña

y acampando en Geba.

El poblado de Ramá queda paralizado de temor

y toda la gente de Guibeá, el pueblo de Saúl,

corre para salvar su vida.

30 Griten de terror,

gente de Galim.

Grítenle una advertencia a Lais.

¡Oh, pobre Anatot!

31 Allá va la gente de Madmena, todos huyen;

los ciudadanos de Gebim tratan de esconderse.

32 El enemigo se detiene en Nob por el resto del día;

amenaza con el puño al hermoso monte de Sión, el monte de Jerusalén.

33 ¡Pero miren! El Señor, elSeñorde los Ejércitos Celestiales,

con gran fuerza cortará al poderoso árbol de Asiria.

Echará abajo a los soberbios;

ese árbol altanero será talado.

34 Cortará con un hacha los árboles de los bosques;

el Líbano caerá ante el Poderoso.

Isaías 11

Retoño del linaje de David

1 Del tocón de la familia de Davidsaldrá un brote.

Sí, un Retoño nuevo que dará fruto de la raíz vieja.

2 Y el Espíritu delSeñorreposará sobre él:

el Espíritu de sabiduría y de entendimiento,

el Espíritu de consejo y de poder,

el Espíritu de conocimiento y de temor delSeñor.

3 Él se deleitará en obedecer alSeñor;

no juzgará por las apariencias

ni tomará decisiones basadas en rumores.

4 Hará justicia a los pobres

y tomará decisiones imparciales con los que son explotados.

La tierra temblará con la fuerza de su palabra,

y bastará un soplo de su boca para destruir a los malvados.

5 Llevará la justicia como cinturón

y la verdad como ropa interior.

6 En ese día el lobo y el cordero vivirán juntos,

y el leopardo se echará junto al cabrito.

El ternero y el potro estarán seguros junto al león,

y un niño pequeño los guiará a todos.

7 La vaca pastará cerca del oso,

el cachorro y el ternero se echarán juntos,

y el león comerá heno como las vacas.

8 El bebé jugará seguro cerca de la guarida de la cobra;

así es, un niño pequeño meterá la mano en un nido de víboras mortales y no le pasará nada.

9 En todo mi monte santo no habrá nada que destruya o haga daño,

porque así como las aguas llenan el mar,

así también la tierra estará llena de gente que conocerá alSeñor.

10 En ese día, el heredero del trono de David

será estandarte de salvación para el mundo entero.

Las naciones se reunirán junto a él,

y la tierra donde vive será un lugar glorioso.

11 En ese día, el Señor extenderá su mano por segunda vez

para traer de regreso al remanente de su pueblo:

los que queden en Asiria y el norte de Egipto;

en el sur de Egipto, Etiopíay Elam;

en Babilonia,Hamat y todas las tierras costeras distantes.

12 Levantará bandera en medio de las naciones

y reunirá a los desterrados de Israel.

Juntará al pueblo disperso de Judá

desde los confines de la tierra.

13 Entonces por fin terminarán los celos entre Israely Judá

y dejarán de ser rivales.

14 Unirán sus fuerzas para caer encima de Filistea al occidente.

Juntos, atacarán y saquearán a las naciones situadas al oriente.

Ocuparán las tierras de Edom y de Moab,

y Amón los obedecerá.

15 ElSeñorabrirá un camino seco a través del golfo del mar Rojo.

Moverá su mano sobre el río Éufrates

y enviará un poderoso viento para dividirlo en siete corrientes,

de manera que se podrá cruzar a pie con facilidad.

16 Abrirá una carretera para el remanente de su pueblo,

el remanente que viene de Asiria,

tal como lo hizo por Israel hace mucho tiempo

cuando regresó de Egipto.

Isaías 12

Cantos de alabanza por la salvación

1 En aquel día, tú cantarás:

«¡Te alabaré, ohSeñor!

Estabas enojado conmigo, pero ya no.

Ahora me consuelas.

2 Miren, Dios ha venido a salvarme.

Confiaré en él y no tendré temor.

ElSeñorDioses mi fuerza y mi canción;

él me ha dado la victoria».

3 ¡Con alegría ustedes beberán abundantemente

de la fuente de la salvación!

4 En ese día maravilloso cantarán:

«¡Den gracias alSeñor! ¡Alaben su nombre!

Cuenten a las naciones lo que él ha hecho;

háganles saber lo poderoso que él es.

5 Canten alSeñor, porque ha hecho cosas maravillosas.

Den a conocer su alabanza en el mundo entero.

6 ¡Que todos los habitantes de Jerusaléngriten sus alabanzas con alegría!

Pues grande es el Santo de Israel, que vive en medio de ustedes».

Isaías 13

Mensaje acerca de Babilonia

1 Isaías, hijo de Amoz, recibió el siguiente mensaje acerca de la destrucción de Babilonia:

2 «Levanta una bandera de señales en la cumbre descubierta de una colina;

llama al ejército contra Babilonia.

Hazles señas con la mano para darles ánimo

mientras marchan hacia los palacios de los grandes y poderosos.

3 Yo, elSeñor, he consagrado a estos soldados para realizar esta tarea.

Es cierto, he llamado a guerreros poderosos para que manifiesten mi enojo,

y ellos se alegrarán cuando yo sea exaltado».

4 ¡Oigan el ruido que hay en los montes!

¡Escuchen, mientras marchan los enormes ejércitos!

Es el ruido y el griterío de muchas naciones.

ElSeñorde los Ejércitos Celestiales ha convocado a este ejército.

5 Vienen desde países distantes,

desde más allá de los horizontes lejanos.

Son las armas delSeñorpara descargar su enojo;

con ellas destruirá toda la tierra.

6 Griten de terror, porque ha llegado el día delSeñor,

el momento para que el Todopoderoso destruya.

7 Todos los brazos están paralizados de temor,

cada corazón se derrite

8 y todos se aterran.

Les sobrevendrán punzadas de angustia,

como las de una mujer que está de parto.

Se miran unos a otros sin poder hacer nada,

con el rostro encendido de miedo.

9 Pues miren, el día delSeñorya viene,

el día terrible de su furia y de su ira feroz.

La tierra quedará desolada,

y con ella los pecadores serán destruidos.

10 Los cielos se pondrán negros sobre ellos;

las estrellas no darán luz.

El sol estará oscuro cuando salga

y la luna no iluminará.

11 «Yo, elSeñor, castigaré al mundo por su maldad

y a los perversos por su pecado.

Aplastaré la arrogancia de los soberbios

y humillaré el orgullo de los poderosos.

12 Haré que la gente sea más escasa que el oro;

más escasa que el oro fino de Ofir.

13 Pues sacudiré los cielos

y la tierra se saldrá de su lugar

cuando elSeñorde los Ejércitos Celestiales manifieste su furor

en el día de su ira feroz».

14 En Babilonia todos correrán como gacelas perseguidas,

como ovejas sin pastor.

Intentarán encontrar a los suyos

y huir a su propia tierra.

15 El que sea capturado será destruido,

atravesado con una espada.

16 Ante sus propios ojos, estrellarán a sus niños pequeños hasta matarlos.

Sus hogares serán saqueados, y sus mujeres violadas.

17 «Miren, yo incitaré a los medos contra Babilonia.

No se les puede tentar con plata

ni sobornar con oro.

18 Los ejércitos agresores traspasarán a los jóvenes con sus flechas.

No tendrán misericordia de los indefensos bebés

ni compasión de los niños».

19 Babilonia, el más glorioso de los reinos,

la flor del orgullo caldeo,

será devastada como Sodoma y Gomorra

cuando Dios las destruyó.

20 Babilonia nunca más volverá a ser habitada;

permanecerá vacía de generación en generación.

Los nómadas se negarán a acampar allí,

y los pastores no llevarán a sus ovejas para que pasen la noche.

21 Las bestias del desierto se instalarán en la ciudad en ruinas

y en las casas rondarán criaturas aullantes.

Los búhos vivirán en medio de las ruinas

y las cabras salvajes irán allí para danzar.

22 Las hienas aullarán en las fortalezas

y los chacales harán su guarida en los lujosos palacios.

Los días de Babilonia están contados;

pronto llegará el momento de su destrucción.

Isaías 14

Burla contra el rey de Babilonia

1 Pero elSeñortendrá misericordia de los descendientes de Jacob y una vez más elegirá a Israel como su pueblo especial. Lo hará regresar para que se establezca otra vez en su propia tierra. Y gente de varias naciones vendrá para encontrarse con ellos y unirse al pueblo de Israel.

2 Las naciones del mundo ayudarán a que el pueblo de Israel regrese, y los que vengan a vivir en la tierra delSeñorlos servirán. Los que conquistaron a Israel, ellos mismos serán capturados, e Israel gobernará a sus enemigos.

3 En aquel día maravilloso cuando elSeñorle dé descanso a su pueblo de sus angustias y temores, de la esclavitud y de las cadenas,

4 te mofarás del rey de Babilonia y dirás:

«El hombre poderoso ha sido destruido.

Sí, se acabó tu insolencia.

5 Pues elSeñoraplastó tu poder malvado

y puso fin a tu reino perverso.

6 Atacabas al pueblo con incesantes golpes de furia

y dominabas a las naciones dentro de tu poder sofocante

con una tiranía implacable.

7 Sin embargo, finalmente la tierra está en reposo y tranquila.

¡Ahora puede volver a cantar!

8 Hasta los árboles del bosque

—los cipreses y los cedros del Líbano—

cantan esta alegre canción:

“¡Dado que te talaron,

nadie vendrá ahora para talarnos a nosotros!”.

9 »En el lugar de los muertoshay mucha emoción

por tu llegada.

Los espíritus de los líderes mundiales y de los reyes poderosos que murieron hace tiempo

se ponen de pie para verte llegar.

10 Todos exclaman a una voz:

“¡Ahora eres tan débil como nosotros!

11 Tu poder y tu fuerza fueron enterrados contigo.

En tu palacio ha cesado el sonido del arpa.

Ahora los gusanos son tu sábana

y las lombrices, tu manta”.

12 »¡Cómo has caído del cielo,

oh estrella luciente, hijo de la mañana!

Has sido arrojado a la tierra,

tú que destruías a las naciones del mundo.

13 Pues te decías a ti mismo:

“Subiré al cielo para poner mi trono por encima de las estrellas de Dios.

Voy a presidir en el monte de los dioses,

muy lejos en el norte.

14 Escalaré hasta los cielos más altos

y seré como el Altísimo”.

15 En cambio, serás bajado al lugar de los muertos,

a las profundidades más hondas.

16 Allí todos te mirarán y se preguntarán:

“¿Puede ser este el que sacudía la tierra

y hacía temblar a los reinos del mundo?

17 ¿Es este el que destruyó el mundo

y lo convirtió en una tierra baldía?

¿Es este el rey que demolía las grandes ciudades del mundo

y no tenía compasión de sus prisioneros?”.

18 »Los reyes de las naciones yacen en gloria majestuosa,

cada cual en su propia tumba,

19 pero tú serás sacado de tu sepultura

como una rama inútil.

Como un cadáver pisoteado bajo los pies,

serás arrojado a una fosa común

con los que murieron en batalla.

Descenderás al abismo.

20 No te darán un entierro apropiado,

porque destruiste a tu nación

y masacraste a tu pueblo.

Los descendientes de una persona tan malvada

nunca más recibirán honra.

21 ¡Maten a los hijos de este hombre!

¡Que mueran por los pecados de su padre!

Que no se levanten para conquistar la tierra,

y llenar el mundo con sus ciudades».

22 Esto dice elSeñorde los Ejércitos Celestiales:

«¡Yo, yo mismo me he levantado contra Babilonia!

Destruiré a sus hijos, y a los hijos de sus hijos

—dice elSeñor—.

23 Convertiré a Babilonia en un lugar desolado, tierra de búhos,

lleno de pantanos y de ciénagas;

barreré la tierra con la escoba de la destrucción.

¡Yo, elSeñorde los Ejércitos Celestiales, he hablado!».

Mensaje acerca de Asiria

24 ElSeñorde los Ejércitos Celestiales hizo este juramento:

«Sucederá tal como yo lo tengo planeado.

Será tal como lo he decidido.

25 Quebrantaré a los asirios cuando estén en Israel;

los pisotearé en mis montañas.

Mi pueblo ya no será más esclavo de ellos

ni se doblará ante sus cargas pesadas.

26 Tengo un plan para toda la tierra,

una mano de juicio sobre todas las naciones.

27 ElSeñorde los Ejércitos Celestiales ha hablado;

¿quién podrá cambiar sus planes?

Cuando levante su mano,

¿quién lo podrá detener?».

Mensaje acerca de Filistea

28 Recibí este mensaje en el año que murió el rey Acaz:

29 Ustedes, filisteos, no se alegren

de que la vara que los golpeaba se haya roto;

de que el rey que los atacaba esté muerto.

Pues de esa serpiente nacerá otra serpiente aún más venenosa,

¡una serpiente terrible que los destruirá!

30 Alimentaré a los pobres en mis pastos;

los necesitados se acostarán en paz.

En cuanto a ustedes, los aniquilaré con el hambre

y destruiré a los pocos que queden.

31 ¡Giman en las puertas! ¡Lloren en las ciudades!

¡Paralícense de miedo, filisteos!

Un poderoso ejército viene como humo desde el norte;

cada soldado avanza con prisa, ansioso por pelear.

32 ¿Qué les diremos a los mensajeros de los filisteos? Diles:

«ElSeñoredificó a Jerusalén;

sus murallas brindarán refugio a su pueblo oprimido».

Isaías 15

Mensaje acerca de Moab

1 Recibí este mensaje acerca de Moab:

En una sola noche será reducido a escombros el pueblo de Ar,

y la ciudad de Kir, destruida.

2 Tu pueblo irá al templo de Dibón para lamentarse.

Ellos irán a sus santuarios sagrados para llorar.

Gemirán por la suerte de Nebo y de Medeba,

y en su angustia se raparán la cabeza y se cortarán la barba.

3 Vagarán por las calles vestidos de tela áspera;

de cada hogar y plaza pública saldrá el sonido de gemidos.

4 Los habitantes de Hesbón y de Eleale gritarán;

sus voces se oirán hasta en Jahaza.

Los guerreros más valientes de Moab gritarán de terror.

Se paralizarán de temor.

5 Mi corazón llora por Moab.

Su pueblo huye a Zoar y a Eglat-selisiya.

Sube llorando por el camino a Luhit.

Se pueden oír sus gritos de angustia a lo largo del camino a Horonaim.

6 ¡Hasta las aguas de Nimrim se secaron!

Las riberas cubiertas de hierba se quemaron.

Desaparecieron las plantas tiernas;

no queda nada verde.

7 La gente toma sus posesiones

y las carga a través del barranco de los Sauces.

8 Se oye un grito de angustia por toda la tierra de Moab,

desde un extremo hasta el otro,

desde Eglaim hasta Beer-elim.

9 El arroyo cercano a Dibóncorre rojo por la sangre,

¡pero todavía no he terminado con Dibón!

Los leones cazarán a los sobrevivientes,

tanto a los que traten de escapar

como a los que se queden atrás.

Isaías 16

1 Envíen corderos de Sela como tributo

al gobernante de la tierra.

Envíenlos a través del desierto

hasta el monte de la hermosa Sión.

2 Las mujeres de Moab fueron abandonadas como aves sin nido

en los vados del río Arnón.

3 «Ayúdennos —claman—,

defiéndannos de nuestros enemigos.

Protéjannos de sus ataques implacables;

no nos traicionen ahora que hemos escapado.

4 Permitan que nuestros refugiados se queden entre ustedes;

escóndanlos de nuestros enemigos hasta que haya pasado el terror».

Cuando hayan terminado la opresión y la destrucción,

y hayan desaparecido los saqueadores enemigos,

5 Dios establecerá como rey a uno de los descendientes de David.

Él reinará con misericordia y verdad;

hará siempre lo que es justo

y estará deseoso de hacer lo correcto.

6 Hemos oído hablar del soberbio Moab,

de su orgullo, de su arrogancia y de su furia;

pero todo su alarde ha desaparecido.

7 Toda la tierra de Moab llora;

sí, todos se lamentan en Moab

por los pasteles de pasas de Kir-hareset.

Ya no queda ninguno.

8 Las granjas de Hesbón están abandonadas;

los viñedos de Sibma están desiertos.

Los gobernantes de las naciones han quebrantado a Moab,

esa vid tan hermosa.

Sus zarcillos se extendían hacia el norte hasta la ciudad de Jazer

y trepaban hacia el oriente hasta entrar en el desierto.

Sus sarmientos se extendían tan lejos hacia el occidente

que cruzaban por encima del mar Muerto.

9 Así que ahora lloro por Jazer y por los viñedos de Sibma;

mis lágrimas correrán por Hesbón y Eleale.

Ya no hay gritos de júbilo

por sus frutos de verano y sus cosechas.

10 Se acabó la alegría;

desapareció el gozo de la cosecha.

No habrá cantos en los viñedos

ni más gritos felices,

ni se pisarán las uvas en los lagares.

Yo puse fin a la alegría por sus cosechas.

11 El clamor de mi corazón por Moab es como el lamento de un arpa;

estoy lleno de angustia por Kir-hareset.

12 El pueblo de Moab rendirá culto en sus santuarios paganos,

pero no le servirá de nada.

Clamará a los dioses en sus templos,

pero nadie lo podrá salvar.

13 ElSeñorya ha dicho estas cosas acerca de Moab en el pasado.

14 Pero ahora, elSeñordice: «Dentro de tres años, contando cada día,se acabará la gloria de Moab. De su gran población, solo unos cuantos débiles quedarán vivos».