2 Crónicas 5

1 Así terminó Salomón todo su trabajo para el templo delSeñor. Luego trajo todos los obsequios que su padre David había consagrado —la plata, el oro y los diversos objetos— y los guardó en los tesoros del templo de Dios.

Traslado del arca al templo

2 Entonces Salomón mandó llamar a los ancianos de Israel y a todos los jefes de las tribus —los líderes de las familias patriarcales de Israel— para que fueran a Jerusalén. Ellos debían trasladar el arca del pacto delSeñordesde su sitio en la Ciudad de David, también conocida como Sión, hasta el templo.

3 Así que todos los hombres de Israel se reunieron ante el rey durante el Festival de las Enramadas, que se celebra anualmente a comienzos del otoño.

4 Una vez que estaban presentes todos los ancianos de Israel, los levitas levantaron el arca.

5 Los sacerdotes y los levitas trasladaron el arca junto con la carpa especialy todos los objetos sagrados que había en ella.

6 Delante del arca, el rey Salomón y toda la comunidad de Israel sacrificaron ovejas, cabras y ganado, ¡en tal cantidad que fue imposible llevar la cuenta!

7 Luego los sacerdotes llevaron el arca del pacto delSeñoral santuario interior del templo —el Lugar Santísimo— y la colocaron bajo las alas de los querubines.

8 Los querubines extendían sus alas por encima del arca y formaban una especie de cubierta sobre el arca y las varas para transportarla.

9 Estas varas eran tan largas que los extremos podían verse desde el Lugar Santo,que está delante del Lugar Santísimo, pero no desde afuera; y allí permanecen hasta el día de hoy.

10 Lo único que había dentro del arca eran las dos tablas de piedra que Moisés había colocado en ella en el monte Sinaí,donde elSeñorhizo un pacto con los israelitas cuando partieron de Egipto.

11 Luego los sacerdotes salieron del Lugar Santo. Todos los sacerdotes presentes se habían purificado, estuvieran o no de turno ese día.

12 Los levitas que eran músicos —Asaf, Hemán, Jedutún y todos sus hijos y hermanos—, vestidos de mantos de lino fino, estaban de pie en el lado oriental del altar y tocaban címbalos, liras y arpas. A ellos se les unieron ciento veinte sacerdotes que tocaban trompetas.

13 Los trompetistas y los cantores se unieron para alabar y dar gracias alSeñor. Al son de trompetas, címbalos y otros instrumentos, elevaron sus voces y alabaron alSeñorcon las siguientes palabras:

«¡Él es bueno!

¡Su fiel amor perdura para siempre!».

En ese momento una densa nube llenó el templo delSeñor.

14 Los sacerdotes no pudieron seguir con la celebración a causa de la nube, porque la gloriosa presencia delSeñorllenaba el templo de Dios.

2 Crónicas 6

Salomón alaba al Señor

1 Entonces Salomón oró: «OhSeñor, tú dijiste que habitarías en una densa nube de oscuridad.

2 Ahora te he construido un templo glorioso, ¡un lugar donde podrás habitar para siempre!».

3 Luego el rey se dio vuelta hacia toda la comunidad de Israel, que estaba de pie ante él, y después de bendecir al pueblo, dijo:

4 «Alabado sea elSeñor, Dios de Israel, quien cumplió la promesa que le hizo a mi padre David; pues le dijo a mi padre:

5 “Desde el día en que saqué a mi pueblo de la tierra de Egipto, nunca escogí una ciudad de ninguna de las tribus de Israel como el sitio donde se construyera un templo para honrar mi nombre. Tampoco elegí a un rey para que guiara a mi pueblo Israel;

6 pero ahora he elegido a Jerusalén como el lugar para que mi nombre sea honrado, y he elegido a David para que sea rey de mi pueblo Israel”».

7 Después Salomón dijo: «Mi padre David quería construir este templo para honrar el nombre delSeñor, Dios de Israel.

8 Pero elSeñorle dijo: “Tú querías construir el templo para honrar mi nombre; tu intención es buena,

9 pero no serás tú quien lo haga. Será uno de tus hijos quien construya el templo para honrarme”.

10 »Ahora elSeñorha cumplido la promesa que hizo, porque he llegado a ser rey en lugar de mi padre y ocupo el trono de Israel, tal como elSeñorlo prometió. He construido este templo para honrar el nombre delSeñor, Dios de Israel.

11 Allí he colocado el arca, la cual contiene el pacto que elSeñorhizo con el pueblo de Israel».

Oración de dedicación de Salomón

12 Luego Salomón, de pie ante el altar delSeñory frente a toda la comunidad de Israel, levantó las manos en oración.

13 Ahora bien, Salomón había hecho una plataforma de bronce de dos metros con treinta centímetros de largo, dos metros con treinta centímetros de ancho y un metro con cuarenta centímetros de altura,y la había colocado en el centro del atrio exterior del templo. Se puso de pie sobre la plataforma y después se arrodilló frente a toda la comunidad de Israel y levantó las manos hacia el cielo.

14 Oró así:

«OhSeñor, Dios de Israel, no hay Dios como tú en los cielos ni en la tierra. Tú cumples tu pacto y muestras amor inagotable a quienes andan delante de ti de todo corazón.

15 Has cumplido tu promesa a tu siervo David, mi padre. Pronunciaste esa promesa con tu boca y hoy la has cumplido con tus propias manos.

16 »Ahora, ohSeñor, Dios de Israel, lleva a cabo la otra promesa que le hiciste a tu siervo David, mi padre, cuando le dijiste: “Si tus descendientes cuidan su comportamiento y siguen mi ley con fidelidad, así como tú lo has hecho, siempre habrá uno de ellos sentado en el trono de Israel”.

17 Ahora, ohSeñor, Dios de Israel, cumple esta promesa que le hiciste a tu siervo David.

18 »¿Pero es realmente posible que Dios habite en la tierra, entre seres humanos? Ni siquiera los cielos más altos pueden contenerte, ¡mucho menos este templo que he construido!

19 Sin embargo, escucha mi oración y mi súplica, ohSeñormi Dios. Oye el clamor y la oración que tu siervo te eleva.

20 Que día y noche tus ojos estén sobre este templo, este lugar del cual tú has dicho que allí pondrías tu nombre. Que siempre oigas las oraciones que elevo hacia este lugar.

21 Que atiendas las peticiones humildes y fervientes de mi parte y de tu pueblo Israel cuando oremos hacia este lugar. Sí, óyenos desde el cielo donde tú vives y, cuando nos escuches, perdona.

22 »Si alguien agravia a otra persona y se le exige que haga juramento de inocencia ante tu altar en este templo,

23 oye entonces desde el cielo y juzga entre tus siervos, entre el acusador y el acusado. Paga al culpable según su merecido; absuelve al inocente debido a su inocencia.

24 »Si tu pueblo Israel cae derrotado ante sus enemigos por haber pecado contra ti, pero luego vuelve y reconoce tu nombre y eleva oraciones a ti en este templo,

25 oye entonces desde el cielo y perdona el pecado de tu pueblo Israel, y hazlo volver a esta tierra que diste a ellos y a sus antepasados.

26 »Si los cielos se cierran y no hay lluvia porque tu pueblo ha pecado contra ti, y si luego ellos oran hacia este templo y reconocen tu nombre y se apartan de sus pecados, porque tú los has castigado,

27 oye entonces desde el cielo y perdona los pecados de tus siervos, de tu pueblo Israel. Enséñales a seguir el camino correcto y envía lluvia sobre tu tierra, la tierra que diste a tu pueblo como su preciada posesión.

28 »Si hay hambre en la tierra, o pestes, o plagas en los cultivos, o ataques de langostas u orugas, o si los enemigos de tu pueblo invaden el territorio y sitian las ciudades —cualquiera sea el desastre o la enfermedad que ocurra—;

29 si luego tu pueblo Israel ora por sus dificultades con las manos levantadas hacia este templo,

30 oye entonces desde el cielo donde vives, y perdona. Haz con tu pueblo según merecen sus acciones, porque solo tú conoces el corazón de cada ser humano.

31 Entonces ellos te temerán y andarán en tus caminos mientras vivan en la tierra que diste a nuestros antepasados.

32 »En el futuro, los extranjeros que no pertenezcan a tu pueblo Israel oirán de ti. Vendrán de tierras lejanas cuando oigan de tu gran nombre, de tu mano fuerte y de tu brazo poderoso. Cuando ellos oren en dirección a este templo,

33 oye entonces desde el cielo donde vives y concédeles lo que te pidan. De esa forma, todos los habitantes de la tierra llegarán a conocerte y a temerte, igual que tu pueblo Israel. También sabrán que este templo que he construido honra tu nombre.

34 »Si tu pueblo sale a donde tú lo envías a luchar contra sus enemigos, y si ora a ti en dirección a esta ciudad que has escogido y hacia este templo que yo he construido para honrar tu nombre,

35 oye entonces desde el cielo sus oraciones y defiende su causa.

36 »Si ellos pecan contra ti (¿y quién nunca ha pecado?), tal vez te enojes con ellos y permitas que sus enemigos los conquisten y los lleven cautivos a una tierra extranjera, ya sea cerca o lejos.

37 Sin embargo, tal vez en esa tierra, donde estén desterrados, se vuelvan a ti arrepentidos y oren así: “Hemos pecado, hemos hecho lo malo y hemos actuado de manera perversa”.

38 Si ellos se vuelven a ti con todo el corazón y con toda el alma en la tierra en la que estén cautivos, y oran en dirección a la tierra que diste a sus antepasados —hacia esta ciudad que escogiste y hacia este templo que he construido para honrar tu nombre—,

39 oye entonces sus oraciones y sus peticiones desde el cielo donde vives, y defiende su causa. Perdona a tu pueblo que ha pecado contra ti.

40 »Oh Dios mío, que tus ojos estén abiertos y tus oídos atentos a todas las oraciones que se eleven a ti en este lugar.

41 »Ahora levántate, ohSeñorDios, y entra en tu lugar de descanso,

junto con el arca, símbolo de tu poder.

Que tus sacerdotes, ohSeñorDios, se vistan de salvación;

que tus leales servidores se alegren en tu bondad.

42 OhSeñorDios, no rechaces al rey que has ungido.

Recuerda tu amor inagotable hacia tu siervo David».

2 Crónicas 7

Dedicación del templo

1 Cuando Salomón terminó de orar, cayó fuego del cielo que consumió los sacrificios y las ofrendas quemadas, y la gloriosa presencia delSeñorllenó el templo.

2 Los sacerdotes no podían entrar en el templo delSeñorporque la gloriosa presencia delSeñorlo llenaba.

3 Cuando todos los israelitas vieron que el fuego descendía y que la gloriosa presencia delSeñorllenaba el templo, cayeron postrados rostro en tierra y adoraron y alabaron alSeñordiciendo:

«¡Él es bueno!

¡Su fiel amor perdura para siempre!».

4 Luego el rey y todo el pueblo ofrecieron sacrificios alSeñor.

5 El rey Salomón ofreció un sacrificio de veintidós mil cabezas de ganado y ciento veinte mil ovejas y cabras. Así el rey y todo el pueblo dedicaron el templo de Dios.

6 Los sacerdotes ocuparon sus puestos asignados al igual que los levitas, quienes cantaban: «¡Su fiel amor perdura para siempre!». Acompañaban el canto con la música de los instrumentos que el rey David había hecho para alabar alSeñor. Enfrente de los levitas, los sacerdotes hacían sonar las trompetas mientras todo Israel estaba de pie.

7 Luego Salomón consagró la parte central del atrio que está delante del templo delSeñor. Allí presentó las ofrendas quemadas y la grasa de las ofrendas de paz, porque el altar de bronce que había construido no alcanzaba para tantas ofrendas quemadas, ofrendas de grano y la grasa de los sacrificios.

8 Durante los siete días siguientes, Salomón y todo Israel celebraron el Festival de las Enramadas.Se había reunido una gran multitud desde lugares tan lejanos como Lebo-hamat, en el norte, y el arroyo de Egipto, en el sur.

9 Al octavo día hicieron la ceremonia de clausura, porque habían celebrado la dedicación del altar durante siete días y el Festival de las Enramadas también por siete días.

10 Luego, al final de la celebración,Salomón despidió al pueblo. Todos estaban llenos de alegría y muy contentos porque elSeñorhabía sido bueno con David, con Salomón y con su pueblo Israel.

Respuesta del Señor a Salomón

11 Así que Salomón terminó de construir el templo delSeñory también el palacio real. Llevó a cabo todo lo que había pensado hacer en la construcción del templo y del palacio.

12 Luego una noche elSeñorse le apareció a Salomón y le dijo:

«He oído tu oración y he elegido este templo como el lugar para que se realicen sacrificios.

13 Puede ser que a veces yo cierre los cielos para que no llueva o mande langostas para que devoren las cosechas o envíe plagas entre ustedes;

14 pero si mi pueblo, que lleva mi nombre, se humilla y ora, busca mi rostro y se aparta de su conducta perversa, yo oiré desde el cielo, perdonaré sus pecados y restauraré su tierra.

15 Mis ojos estarán abiertos y mis oídos atentos a cada oración que se eleve en este lugar.

16 Pues he elegido este templo y lo he apartado para que sea santo, un lugar donde mi nombre será honrado para siempre. Lo vigilaré sin cesar, porque es muy preciado a mi corazón.

17 »En cuanto a ti, si me sigues fielmente como lo hizo tu padre David y obedeces todos mis mandatos, decretos y ordenanzas,

18 entonces estableceré tu dinastía en el trono. Pues hice este pacto con tu padre David cuando le dije: “Uno de tus descendientes siempre gobernará a Israel”.

19 »Sin embargo, si tú o tus descendientes me abandonan y desobedecen los decretos y los mandatos que les he dado, y sirven y rinden culto a otros dioses,

20 entonces desarraigaré al pueblo de la tierra que le he dado. Rechazaré este templo que hice santo para honrar mi nombre. Haré que sea objeto de burla y de ridículo entre las naciones;

21 y aunque ahora este templo sea imponente, todos los que pasen por allí quedarán horrorizados. Preguntarán: “¿Por qué habrá hecho elSeñorcosas tan terribles a esta tierra y a este templo?”.

22 »Y la respuesta será: “Porque los israelitas abandonaron alSeñor, Dios de sus antepasados, quien los sacó de Egipto, y rindieron culto a otros dioses y se inclinaron ante ellos. Por esa razón les envió tantas calamidades”».

2 Crónicas 8

Numerosos logros de Salomón

1 Salomón tardó veinte años en construir el templo delSeñory su propio palacio real. Al cabo de ese tiempo,

2 Salomón dirigió su atención a la reconstrucción de las ciudades que le había dado el rey Hiramy estableció israelitas en ellas.

3 Salomón también luchó contra la ciudad de Hamat de Soba y la conquistó.

4 Reconstruyó Tadmor, en el desierto, y construyó ciudades en la región de Hamat como centros de almacenamiento.

5 Fortificó las ciudades de Bet-horón de arriba y Bet-horón de abajo, reconstruyó sus murallas e instaló portones con rejas.

6 También reconstruyó Baalat y otros centros de almacenamiento y construyó ciudades para sus carros de guerra y sus caballos.Construyó todo lo que quiso en Jerusalén, en el Líbano y por todo su reino.

7 En esa tierra todavía había habitantes que no eran israelitas, entre los cuales se encontraban hititas, amorreos, ferezeos, heveos y jebuseos.

8 Todos ellos eran descendientes de las naciones que el pueblo de Israel no había destruido. Entonces Salomón los obligó a ser parte de sus trabajadores y hasta el día de hoy son trabajadores forzados;

9 pero Salomón no obligó a ningún israelita a ser parte de sus trabajadores, sino que los puso a su servicio como soldados, oficiales en su ejército, y comandantes y conductores de sus carros de guerra.

10 El rey Salomón también designó a doscientos cincuenta de ellos para que supervisaran a los trabajadores.

11 Salomón trasladó a su esposa, la hija del faraón, de la Ciudad de David al palacio nuevo que le había edificado, y dijo: «Mi esposa no debe vivir en el palacio del rey David, porque allí ha estado el arca delSeñory es tierra santa».

12 Luego Salomón presentó ofrendas quemadas alSeñorsobre el altar que le había construido frente a la antesala del templo.

13 Ofrecía sacrificios para los días de descanso, los festivales de luna nueva y los tres festivales anuales —la Pascua, el Festival de la Cosechay el Festival de las Enramadas— como Moisés había ordenado.

14 Para asignar las responsabilidades a los sacerdotes, Salomón siguió el reglamento de su padre David. También designó a los levitas para dirigir al pueblo en alabanza y para ayudar a los sacerdotes en sus tareas diarias. Designó porteros para cada puerta según sus divisiones, siguiendo las órdenes de David, hombre de Dios.

15 Salomón no se desvió en absoluto de las órdenes de David respecto a los sacerdotes, los levitas y los tesoros.

16 Así Salomón se aseguró de que todo el trabajo relacionado con la construcción del templo delSeñorse llevara a cabo, desde el día en que se echaron los cimientos hasta el día en que se terminó.

17 Tiempo después Salomón fue a Ezión-geber y a Elat,puertos que están a la orilla del mar Rojoen la tierra de Edom.

18 Hiram le envió barcos comandados por sus propios oficiales y tripulados por marineros expertos. Estos barcos navegaron hasta Ofir con los hombres de Salomón y regresaron con unas quince toneladasde oro, que entregaron a Salomón.

2 Crónicas 9

Visita de la reina de Saba

1 Cuando la reina de Saba se enteró de la fama de Salomón, viajó a Jerusalén para ponerlo a prueba con preguntas difíciles. Llegó con un gran séquito de asistentes y una enorme caravana de camellos cargados con especias, grandes cantidades de oro y piedras preciosas.

2 Cuando se presentó ante Salomón, habló con él acerca de todo lo que ella tenía en mente. Salomón tenía respuestas para todas sus preguntas; nada le resultaba demasiado difícil de explicar.

3 Cuando la reina de Saba se dio cuenta de lo sabio que era Salomón y vio el palacio que él había construido,

4 quedó atónita. También estaba asombrada por la comida que se servía en las mesas del rey, por la forma en que estaban organizados sus funcionarios y la ropa espléndida que usaban, por los coperos y sus mantos, y por las ofrendas quemadas que ofrecíaSalomón en el templo delSeñor.

5 Entonces la reina exclamó: «¡Todo lo que oí en mi país acerca de tus logrosy de tu sabiduría es cierto!

6 Yo no creía lo que se dijo hasta que llegué aquí y lo vi con mis propios ojos. De hecho, ¡lo que había oído no refleja ni la mitad de tu sabiduría! Supera ampliamente lo que me habían dicho.

7 ¡Qué feliz debe estar tu pueblo! ¡Qué privilegio para tus funcionarios estar aquí en tu presencia día tras día, escuchando tu sabiduría!

8 Alabado sea elSeñortu Dios, quien se deleita en ti y te ha puesto en el trono como rey para que gobiernes para él. Debido a que Dios ama a Israel y desea que este reino permanezca para siempre, te ha hecho rey sobre ellos para que puedas gobernar con justicia y rectitud».

9 Luego le regaló al rey cuatro mil kilosde oro, grandes cantidades de especias y de piedras preciosas. Nunca antes hubo especias tan finas como las que la reina de Saba le regaló al rey Salomón.

10 (Además, las tripulaciones de Hiram y de Salomón trajeron oro desde Ofir, y también madera de sándalorojo y piedras preciosas.

11 Con el sándalo, el rey construyó escalonespara el templo delSeñory para el palacio real, e hizo liras y arpas para los músicos. Nunca antes se habían visto cosas tan hermosas en Judá).

12 El rey Salomón le dio a la reina de Saba todo lo que ella pidió, regalos de mayor valor que los que ella le había entregado a él. Luego ella y todos sus acompañantes regresaron a su tierra.

Riqueza y esplendor de Salomón

13 Cada año Salomón recibía unas veintitrés toneladasde oro,

14 sin contar los ingresos adicionales que recibía de mercaderes y comerciantes. Además, todos los reyes de Arabia y los gobernantes de las provincias también le llevaban a Salomón oro y plata.

15 El rey Salomón fabricó doscientos escudos grandes de oro labrado a martillo; cada uno pesaba casi siete kilos.

16 También hizo trescientos escudos más pequeños de oro labrado a martillo; cada uno pesaba tres kilos y medio.El rey colocó los escudos en el Palacio del Bosque del Líbano.

17 Luego el rey hizo un gran trono, decorado con marfil y revestido de oro puro.

18 El trono tenía seis escalones y un estrado de oro. A cada lado del asiento había apoyabrazos, y a cada lado del trono había una figura de león de pie.

19 Había también otros doce leones, uno en cada extremo de los seis escalones. ¡No había trono en todo el mundo que pudiera compararse con el de Salomón!

20 Todas las copas del rey Salomón eran de oro macizo, igual que todos los utensilios en el Palacio del Bosque del Líbano. No estaban hechos de plata porque en los tiempos de Salomón la plata no se consideraba de valor.

21 El rey tenía una flota de barcos mercantes de Tarsis tripulada por marineros enviados por Hiram.Una vez cada tres años, los barcos regresaban cargados de oro, plata, marfil, simios y pavos reales.

22 De modo que Salomón llegó a ser más rico y más sabio que cualquier otro rey de la tierra.

23 Reyes de todas las naciones lo visitaban para consultarlo y escuchar la sabiduría que Dios le había dado.

24 Año tras año, cada visitante le llevaba regalos de plata y oro, ropa, armas, especias, caballos y mulas.

25 Salomón tenía cuatro mil establos para sus caballos y carros de guerra, y doce mil caballos.Los colocó en las ciudades designadas para guardar los carros y también cerca de él en Jerusalén.

26 Gobernaba a todos los reyes desde el río Éufrates,en el norte, hasta la tierra de los filisteos y la frontera con Egipto, en el sur.

27 El rey hizo que en Jerusalén la plata fuera tan abundante como las piedras. Además, la valiosa madera de cedro era tan común como la higuera sicómoro que crece en las colinas de Judá.

28 Los caballos de Salomón se importaban de Egiptoy de muchos otros países.

Resumen del reinado de Salomón

29 Los demás acontecimientos del reinado de Salomón, desde el principio hasta el fin, están registrados enEl registro del profeta Natán, enLa profecía de Ahías de Siloy también enLas visiones de Iddo el videnteacerca de Jeroboam, hijo de Nabat.

30 Salomón gobernó en Jerusalén a todo Israel durante cuarenta años.

31 Cuando murió, lo enterraron en la Ciudad de David, la cual llevaba ese nombre por su padre. Luego su hijo Roboam lo sucedió en el trono.

2 Crónicas 10

Las tribus del norte se rebelan

1 Roboam fue a Siquem, donde todo Israel se había reunido para proclamarlo rey.

2 Cuando Jeroboam, hijo de Nabat, se enteró de esto, regresó de Egipto, donde había huido para escapar del rey Salomón.

3 Entonces los líderes de Israel mandaron a llamar a Jeroboam, y él junto con todo Israel fueron a hablar con Roboam.

4 —Su padre fue un amo muy duro —le dijeron—. Alivie los trabajos tan pesados y los impuestos tan altos que su padre impuso sobre nosotros. Entonces seremos sus leales súbditos.

5 Roboam les respondió:

—Regresen en tres días y les daré una respuesta.

Entonces el pueblo se retiró.

6 Después el rey Roboam consultó el asunto con los ancianos que habían sido consejeros de su padre Salomón.

—¿Qué me aconsejan ustedes? —les preguntó—. ¿Cómo debo responder a este pueblo?

7 Los consejeros ancianos contestaron:

—Si se muestra bondadoso con este pueblo y hace todo lo posible por complacerlos y darles una respuesta favorable, ellos siempre serán sus leales súbditos.

8 Sin embargo, Roboam rechazó el consejo de los ancianos y pidió, en cambio, la opinión de los jóvenes que se habían criado con él y que ahora eran sus consejeros.

9 —¿Qué me aconsejan ustedes? —les preguntó—. ¿Cómo debo responder a esta gente que me pide que alivie las cargas que impuso mi padre?

10 Los jóvenes contestaron:

—Así debería responder a esos que se quejan de todo y que quieren una carga más liviana: “¡Mi dedo meñique es más grueso que la cintura de mi padre!

11 Es cierto que mi padre les impuso cargas pesadas, ¡pero yo las haré aún más pesadas! ¡Mi padre los golpeaba con látigos, pero yo los azotaré con escorpiones!”.

12 Tres días después, Jeroboam y toda la gente regresaron para conocer la decisión de Roboam, tal como el rey había ordenado.

13 Entonces Roboam les habló con dureza porque rechazó el consejo de los ancianos

14 y siguió el consejo de los más jóvenes. Así que le dijo al pueblo: «Mi padre les impusocargas pesadas, ¡pero yo las haré aún más pesadas! Mi padre los golpeaba con látigos, ¡pero yo los azotaré con escorpiones!».

15 Por lo tanto, el rey no prestó atención al pueblo. Este giro en la historia ocurrió por voluntad de Dios, porque cumplía el mensaje que elSeñorle había dado a Jeroboam, hijo de Nabat, por medio del profeta Ahías de Silo.

16 Cuando todos los israelitas se dieron cuentade que el rey no iba a hacerles caso, respondieron:

«¡Abajo la dinastía de David!

No nos interesa para nada el hijo de Isaí.

¡Regresa a tu casa, Israel!

Y tú, David, ¡cuida de tu propia casa!».

Entonces el pueblo de Israel regresó a casa;

17 pero Roboam siguió gobernando a los israelitas que vivían en las ciudades de Judá.

18 Luego el rey Roboam envió a Adoniram,quien estaba a cargo del trabajo forzado, a restaurar el orden, pero el pueblo de Israel lo apedreó a muerte. Cuando el rey Roboam se enteró, enseguida subió a su carro de guerra y huyó a Jerusalén.

19 Hasta el día de hoy, las tribus del norte de Israel se han negado a ser gobernadas por un descendiente de David.

2 Crónicas 11

Profecía de Semaías

1 Cuando Roboam llegó a Jerusalén, movilizó a los hombres de Judá y de Benjamín —ciento ochenta mil guerreros selectos— para pelear contra Israel y recuperar el reino.

2 Ahora bien, elSeñorle dijo a Semaías, hombre de Dios:

3 «Diles a Roboam, hijo de Salomón, rey de Judá, y a todos los israelitas de Judá y de Benjamín:

4 “Esto dice elSeñor: ‘No peleen contra sus parientes. ¡Regrese cada uno a su casa, porque lo que ha sucedido es obra mía!’”». Entonces ellos obedecieron el mensaje delSeñory no pelearon contra Jeroboam.

Roboam fortifica Judá

5 Roboam permaneció en Jerusalén y fortificó varias ciudades para la defensa de Judá.

6 Fortificó Belén, Etam, Tecoa,

7 Bet-sur, Soco, Adulam,

8 Gat, Maresa, Zif,

9 Adoraim, Laquis, Azeca,

10 Zora, Ajalón y Hebrón. Estas fueron las ciudades fortificadas de Judá y de Benjamín.

11 Roboam reforzó sus defensas y estableció comandantes en ellas, y almacenó provisiones de alimento, aceite de oliva y vino.

12 También, como medida de seguridad adicional, puso escudos y lanzas en esas ciudades. Así que solo Judá y Benjamín quedaron bajo su control.

13 Todos los sacerdotes y levitas que vivían en las tribus del norte de Israel se aliaron con Roboam.

14 Los levitas incluso abandonaron sus pastizales y sus propiedades y se trasladaron a Judá y a Jerusalén, porque Jeroboam y sus hijos no les permitían servir alSeñorcomo sacerdotes.

15 Jeroboam nombró a sus propios sacerdotes para servir en los santuarios paganos, donde rindieron culto a ídolos con forma de cabra y de becerro que él había hecho.

16 De todas las tribus de Israel, los que querían adorar de corazón alSeñor, Dios de Israel, siguieron a los levitas a Jerusalén, donde podían ofrecer sacrificios alSeñor, Dios de sus antepasados.

17 Esto fortaleció el reino de Judá, y durante tres años apoyaron a Roboam, hijo de Salomón, pues durante esos años ellos siguieron fielmente los pasos de David y de Salomón.

Familia de Roboam

18 Roboam se casó con su prima Mahalat, hija de Jerimot, quien era hijo de David y Abihail, hija de Eliab, hijo de Isaí.

19 Mahalat tuvo tres hijos: Jeús, Semarías y Zaham.

20 Tiempo después, Roboam se casó con otra prima, Maaca, nieta de Absalón. Maaca dio a luz a Abías, Atai, Ziza y Selomit.

21 Roboam amó a Maaca más que a cualquiera de sus otras esposas y concubinas. En total, tuvo dieciocho esposas y sesenta concubinas que le dieron veintiocho hijos y sesenta hijas.

22 Roboam nombró líder entre los príncipes a Abías, hijo de Maaca, y así puso en claro que él sería el próximo rey.

23 Roboam actuó sabiamente dándoles a sus demás hijos responsabilidades y estableciendo a algunos en las ciudades fortificadas por todo Judá y Benjamín. Les dio abundantes provisiones y encontró muchas esposas para ellos.

2 Crónicas 12

Egipto invade Judá

1 Cuando Roboam estaba fuerte y firmemente establecido, abandonó la ley delSeñory todo Israel lo siguió en este pecado.

2 Debido a que fueron infieles alSeñor, el rey Sisac de Egipto subió y atacó Jerusalén en el quinto año del reinado de Roboam.

3 Llegó con mil doscientos carros, sesenta mil caballosy un ejército incontable de soldados de infantería, integrado por libios, suquienos y etíopes.

4 Sisac conquistó las ciudades fortificadas de Judá y luego avanzó para atacar Jerusalén.

5 Entonces el profeta Semaías se reunió con Roboam y con los líderes de Judá, quienes habían huido a Jerusalén por causa de Sisac. Semaías les dijo:

—Esto dice elSeñor: “Ustedes me abandonaron, y por eso yo los abandono en manos de Sisac”.

6 Entonces los líderes de Israel y el rey se humillaron y dijeron:

—¡ElSeñores justo al hacer esto con nosotros!

7 Cuando elSeñorvio el cambio de actitud en ellos, le dio este mensaje a Semaías: «Puesto que el pueblo se ha humillado, no lo destruiré completamente y pronto le daré cierto alivio. No usaré a Sisac para derramar mi enojo sobre Jerusalén;

8 pero serán súbditos de Sisac, para que conozcan la diferencia entre servirme a mí y servir a los gobernantes terrenales».

9 Entonces el rey Sisac de Egipto subió y atacó Jerusalén. Saqueó los tesoros del templo delSeñory del palacio real; robó todo, incluso los escudos de oro que Salomón había hecho.

10 Tiempo después, el rey Roboam los reemplazó con escudos de bronce y los confió al cuidado de los comandantes de la guardia, quienes protegían la entrada del palacio real.

11 Cada vez que el rey iba al templo delSeñor, los guardias llevaban los escudos y luego los devolvían al cuarto de guardia.

12 Como Roboam se humilló, se apartó el enojo delSeñory no lo destruyó por completo. Aún quedaban algunas cosas buenas en la tierra de Judá.

Resumen del reinado de Roboam

13 El rey Roboam se estableció firmemente en Jerusalén y siguió gobernando. Tenía cuarenta y un años cuando subió al trono y reinó diecisiete años en Jerusalén, la ciudad que elSeñorhabía elegido entre todas las tribus de Israel como el lugar para honrar su nombre. Su madre era una mujer de Amón que se llamaba Naama.

14 Fue un rey malvado, porque no buscó alSeñorcon todo el corazón.

15 Los demás acontecimientos del reinado de Roboam, desde el principio hasta el fin, están anotados enEl registro de Semaías el profetay enEl registro de Iddo el vidente, que forman parte del registro genealógico. Roboam y Jeroboam estaban constantemente en guerra el uno contra el otro.

16 Cuando Roboam murió, lo enterraron en la Ciudad de David. Luego su hijo Abías lo sucedió en el trono.

2 Crónicas 13

Guerra entre Abías y Jeroboam

1 Abías comenzó a gobernar Judá en el año dieciocho del reinado de Jeroboam en Israel.

2 Reinó en Jerusalén tres años. Su madre se llamaba Maaca,y era hija de Uriel de Guibeá.

Luego estalló la guerra entre Abías y Jeroboam.

3 Judá, dirigido por el rey Abías, entró en acción con un ejército de cuatrocientos mil guerreros selectos, mientras Jeroboam reunió una tropa selecta de ochocientos mil hombres de Israel.

4 Cuando el ejército de Judá llegó a la zona montañosa de Efraín, Abías, de pie sobre el monte Zemaraim, le gritó a Jeroboam y a todo Israel: «¡Escúchenme!

5 ¿No se dan cuenta de que elSeñor, Dios de Israel, hizo un pacto duraderocon David, y les dio a él y a sus descendientes el trono de Israel para siempre?

6 Sin embargo, Jeroboam, hijo de Nabat, un simple siervo de Salomón, hijo de David, se rebeló contra su amo.

7 Luego se le unió toda una banda de sinvergüenzas, quienes desafiaron a Roboam, hijo de Salomón, cuando todavía era joven y sin experiencia y no podía hacerles frente.

8 »¿Realmente creen que pueden oponerse al reino delSeñorel cual es dirigido por los descendientes de David? Puede que ustedes tengan un enorme ejército, y tienen esos becerros de oro que Jeroboam les hizo como dioses;

9 pero han expulsado a los sacerdotes delSeñor(los descendientes de Aarón) y a los levitas, y han nombrado a sus propios sacerdotes, al igual que las naciones paganas. ¡Hoy día ustedes permiten que cualquiera sea sacerdote! Quienquiera que se presente para ser dedicado y traiga un becerro y siete carneros puede llegar a ser un sacerdote de esos así llamados dioses de ustedes.

10 »Pero en cuanto a nosotros, elSeñores nuestro Dios, y no lo hemos abandonado. Solo los descendientes de Aarón sirven alSeñorcomo sacerdotes, y solo los levitas pueden ayudarlos en su trabajo.

11 Ellos presentan ofrendas quemadas e incienso aromático alSeñorcada mañana y cada tarde. Colocan el pan de la Presencia en la mesa sagrada y encienden cada noche el candelabro de oro. Nosotros seguimos las instrucciones delSeñornuestro Dios, pero ustedes lo han abandonado.

12 Así que como pueden ver, Dios está con nosotros; él es nuestro líder. Sus sacerdotes tocan las trompetas y nos dirigen en batalla contra ustedes. ¡Oh pueblo de Israel, no luches contra elSeñor, Dios de tus antepasados, porque no tendrás éxito!».

13 Mientras tanto, Jeroboam había enviado en secreto una parte de su ejército para rodear por la retaguardia a los hombres de Judá y tenderles una emboscada.

14 Cuando los de Judá se dieron cuenta de que los estaban atacando por delante y por detrás, clamaron alSeñorpor ayuda. Entonces los sacerdotes tocaron las trompetas,

15 y los hombres de Judá empezaron a gritar. Al sonido de su grito de batalla, Dios derrotó a Jeroboam y a todo Israel. Los derrotó de forma aplastante delante de Abías y del ejército de Judá.

16 El ejército israelita huyó de Judá, y Dios lo entregó derrotado en sus manos.

17 Abías y su ejército les causaron grandes pérdidas; ese día murieron quinientos mil soldados selectos de Israel.

18 Así que Judá venció a Israel en esa ocasión porque confió en elSeñor, Dios de sus antepasados.

19 Abías y su ejército persiguieron a las tropas de Jeroboam y conquistaron algunas de sus ciudades, entre ellas Betel, Jesana y Efrón, junto con sus aldeas vecinas.

20 De modo que Jeroboam de Israel nunca recuperó su poder mientras vivió Abías, y finalmente elSeñorlo hirió y murió.

21 Mientras tanto, Abías de Judá se hizo cada vez más poderoso. Tuvo catorce esposas, veintidós hijos y dieciséis hijas.

22 Los demás acontecimientos del reinado de Abías, incluidos sus palabras y sus logros, están registrados enEl comentario de Iddo el profeta.

2 Crónicas 14

Primeros años del reinado de Asa

1 Cuando Abías murió, lo enterraron en la Ciudad de David. Después su hijo Asa lo sucedió en el trono. Hubo paz en la tierra durante diez años.

2 Asa hizo lo que era agradable y bueno a los ojos delSeñorsu Dios.

3 Quitó los altares extranjeros y los santuarios paganos. Destruyó las columnas sagradas y derribó los postes dedicados a la diosa Asera.

4 Ordenó al pueblo de Judá que buscara alSeñor, Dios de sus antepasados, y que obedeciera su ley y sus mandatos.

5 Asa también quitó los santuarios paganos y los altares del incienso de cada una de las ciudades de Judá. Entonces el reino de Asa disfrutó un período de paz.

6 Durante los años de paz, Asa pudo reconstruir las ciudades fortificadas en todo Judá. Nadie estuvo en guerra contra él durante ese tiempo, porque elSeñorle daba descanso de sus enemigos.

7 Asa le dijo a la gente de Judá: «Construyamos y fortifiquemos ciudades con murallas, torres, puertas y barras. La tierra aún nos pertenece porque buscamos alSeñornuestro Dios, y él nos ha dado paz en todo el territorio». Así que continuaron con estos proyectos hasta completarlos.

8 El rey Asa tenía un ejército de trescientos mil guerreros de la tribu de Judá, armados con grandes escudos y lanzas. También tenía un ejército de doscientos ochenta mil guerreros de la tribu de Benjamín, armados con arcos y escudos pequeños. Ambos ejércitos estaban constituidos por hombres de guerra bien entrenados.

9 Cierta vez un etíopellamado Zera atacó a Judá con un ejército de un millón de soldadosy trescientos carros de guerra. Avanzaron hacia la ciudad de Maresa,

10 por eso Asa desplegó sus ejércitos para la batalla en el valle al norte de Maresa.

11 Entonces Asa clamó alSeñorsu Dios: «¡OhSeñor, nadie sino tú puede ayudar al débil contra el poderoso! Ayúdanos, ohSeñornuestro Dios, porque solo en ti confiamos. Es en tu nombre que hemos salido contra esta inmensa multitud. ¡OhSeñor, tú eres nuestro Dios; no dejes que simples hombres prevalezcan contra ti!».

12 Entonces elSeñorderrotó a los etíopesen presencia de Asa y del ejército de Judá, y el enemigo huyó.

13 Asa y su ejército los persiguieron hasta Gerar, y cayeron tantos etíopes que no pudieron reagruparse. ElSeñory su ejército los destruyeron; y el ejército de Judá se llevó un enorme botín.

14 Mientras estaban en Gerar, atacaron todas las ciudades de la región, y un terror de parte delSeñorse apoderó de la gente. Como resultado, también se llevaron un enorme botín de esas ciudades.

15 Además, atacaron los campamentos de los pastores y capturaron muchas ovejas, cabras y camellos antes de regresar a Jerusalén.